Serchi & Blanquis

Conozco a Blanca desde la Universidad y sé de su gusto por la pintura y el arte en general. Por eso no me extraña que haya coincidido con alguien como Serch, diseñador de productos y músico que fluye entre géneros diversos como metal, jazz y ritmos tropicales. Un par de nicas, actualmente residiendo en Costa Rica y tratando de sacar adelante proyectos inspirados por anhelos compartidos y que logran complementar desde sus disciplinas. 

Una serie de eventos afortunados: Cuando se trata de cosas que son inevitables que se den con el paso del tiempo, la manera en la que se conocieron Serch y Blanca podría ser una de ellas. De esas causalidades de la vida donde luego de estar cerca y coincidir en muchos conciertos, donde la música y los amigos en común estaban presentes para propiciar hablarse y que un saludo simple se convirtiera en horas y madrugadas completas de pláticas en un balcón de la capital. “Nos quedábamos a hablar desde que salía de ensayos como a media noche, hasta la madrugada del día siguiente, cuando tocaba correr para ir al trabajo, donde también nos vivíamos encontrando, porque no solo trabajamos en el mismo edificio, íbamos a los mismos eventos, sino que descubrimos que vivíamos a tan solo unas cuantas casas de distancia.” Me comentaba Sergio. 

Un consejo: Cuando le pregunté a Blanca cuál sería el aspecto más difícil que han sobrellevado como pareja, me respondió con un consejo: “Creo que lo más interesante y complejo ha sido descubrir en la práctica y no solo en la teoría que una relación como la que tenemos lleva una inversión de tiempo y esfuerzo, que muchas veces cuando uno está iniciando no es consciente. Que lo más importante es tener la certeza que sin importar lo difíciles de sobrellevar que sean las circunstancias, la persona con la que estás trabajando vale la pena y es un buen compañero/a para seguir aprendiendo. Que incluso amando a alguien se le puede lastimar y que realizar los ajustes necesarios exige mucha sinceridad consigo misma/o y de carácter para mantener los ojos puestos en el crecimiento de ambos, tratando que la relación sea un espacio seguro y de crecimiento para los dos.” 

Experiencia durante la sesión fotográfica: Según lo que me expresaban Sergio: “Lo que nos parece más loco de esta experiencia de hacer la sesión de fotos, fue el hecho de que trascendió tiempo-circunstancias que normalmente harían imposible de realizarse cualquier sesión de fotos y logramos hacerla en pleno centro de San José, Costa Rica, a pesar que hablamos hace más de un año de realizarla en el Cerro Negro en Nicaragua. Y que haya sido a pesar de todo algo espontáneo, con una producción construida sobre la marcha y priorizando la experiencia y no solo el resultado.” “En mi caso siempre he creído en tu buen ojo Edgard y después de esta experiencia más, nos llovió de inicio a fin, tocó correr debajo de la lluvia con el vestido y el ramo empapado y obtener resultados tan buenos a pesar de tener muchos elementos en contra, habla de la destreza fotográfica que te caracteriza.” Comentaba Blanca.